El cuento
La arena ya no es más un suelo firme
Eugenia Zapata
Gloria va a quedarse sola por primera vez en la casa de la playa. Bueno, sola no, con las chicas, que es casi lo mismo, pero peor. Jorge finalmente la convenció.
Gloria preferiría volver a Buenos Aires con él que tiene que trabajar en la oficina, pero ya no intenta que la gente la comprenda cuando lo explica. La miran con cara de desaprobación. “Con el calor infernal que hace en enero en el centro. Qué picardía. Aprovechá. Hacelo por las chicas. Con esa casa divina que se hicieron.”