El cuento
Las reglas del juego
Por Oscar Bracamonte
Para medir un lote hay que ir armando triángulos en el terreno, clavar jalones en las esquinas y calcular los ángulos con el teodolito. Después se miden los lados con la cinta métrica y por operaciones matemáticas se precisa la superficie. Papá y el tío Julio eran ingenieros y cada tanto tenían que hacer una mensura. Esa vez era en un loteo nuevo, más allá de la cancha de Peñarol, en Argüello. Habíamos andado antes por ahí, demarcando unos lotes.